Aceites portadores
Los aceites portadores, también llamados “bases”, tienen la función de transportar el CBD y los demás componentes a nuestro organismo. Una solución simple que actúa para disolver los compuestos de la planta de cáñamo y así conseguir que nuestro cuerpo los absorba con más facilidad.
Por ello, recomendamos disolver los cannabinoides en un aceite adecuado. Los dos aceites portadores clásicos y más utilizados son el MCT (a base de aceite de coco) y el aceite de semillas de cáñamo.


MCT (a base de aceite de coco)
El aceite MCT (Triglicéridos de Cadena Media) está considerado uno de los mejores aceites portadores, ya que sus diminutas moléculas son mucho más fáciles de digerir que las de otras bases.
Gracias a este aceite portador, el CBD es procesado con especial rapidez por nuestro organismo y se absorbe una mayor cantidad de dicho cannabinoide.
Además, el aceite MCT convence especialmente por su aroma sorprendentemente neutro. El MCT más convencional se obtiene del aceite de coco, el cual estimula el metabolismo y ayuda a regular el apetito.

Aceite de semillas de cáñamo
Como su nombre indica, el aceite de semilla de cáñamo se obtiene de las semillas de la planta y también funciona como un perfecto aceite portador o base.
Utilizamos el método más adecuado para la obtención de dicho aceite: el prensado en frío. Es método permite que el líquido se exprima de las semillas a temperaturas de 40°a 60°, por lo que los ingredientes del aceite de cáñamo no se dañan con el calor.
Nuestro aceite de semillas de cáñamo atrae por su suave aroma a nuez y es una buena opción como aceite portador para los aceites cannabinoides. Además, este aceite es rico en ácidos grasos esenciales como el omega-3 y el omega-6, por lo que es saludable y perfecto para cocinar.
Preguntas frecuentes sobre aceites portadores
Un aceite portador es un tipo de aceite utilizado en la aromaterapia y la cosmética para diluir los aceites esenciales antes de su aplicación en la piel. Mientras que los aceites esenciales son muy concentrados y pueden ser irritantes o incluso tóxicos si se aplican directamente sobre la piel, los aceites portadores son aceites vegetales (aceite de almendra dulce, de jojoba, de coco y de oliva), que se mezclan con los aceites esenciales para reducir su intensidad y que sean seguros para su uso tópico. Además, los aceites portadores también proporcionan una hidratación adicional a la piel, lo que mejora su textura y apariencia.
Los aceites esenciales se extraen de plantas, flores, hierbas, árboles, etc. mediante procesos de destilación, prensado en frío, extracción por solventes, entre otros, mientras que los aceites portadores son aceites vegetales que se extraen de frutos, semillas, nueces, granos y otros alimentos naturales.
Los aceites esenciales son altamente concentrados y solo se necesitan pequeñas cantidades para lograr el efecto deseado, mientras que los aceites portadores son menos concentrados y se utilizan para diluir los aceites esenciales.
Los aceites esenciales tienen fragancias intensas y distintivas que varían según la planta de la que se extrajeron, mientras que los aceites portadores tienen una fragancia suave y delicada.
Los aceites esenciales tienen propiedades curativas y terapéuticas únicas debido a sus componentes químicos, mientras que los aceites portadores generalmente tienen propiedades hidratantes y emolientes que ayudan a proteger y nutrir la piel.
El término "aceite de base" se refiere a un aceite portador que se utiliza como base para mezclar con otros aceites esenciales o ingredientes activos. Los aceites de base son generalmente aceites portadores que tienen propiedades hidratantes y nutritivas para la piel, y que son lo suficientemente delicados como para no causar irritación o reacciones alérgicas.
Entre los aceites portadores que se utilizan comúnmente como aceites de base se encuentran el aceite de almendra dulce, el aceite de jojoba, el aceite de semilla de uva, el aceite de coco fraccionado, el aceite de rosa mosqueta y el aceite de argán, entre otros.
La elección del aceite de base dependerá del tipo de piel y de los beneficios específicos que deseas obtener. Por ejemplo, el aceite de jojoba es ideal para pieles grasas debido a su capacidad para regular la producción de sebo, mientras que el aceite de rosa mosqueta es conocido por sus propiedades antiarrugas y regenerativas para la piel madura.
Si no está seguro de qué aceite portador utilizar para su producto, póngase en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarle a desarrollar su producto deseado.
NUESTRA PROMESA DE CALIDAD
Grandes cantidades disponibles directamente
Análisis periódicos
Entrega rápida en Europa